‘La cabeza bien alta’
Escribiendo esta crónica tuve que corregirme. Puse “Rayo Vallecano 3-0 Real Madrid”. El subconsciente juega malas pasadas. Me voy a saltar las reglas del periodismo para poder contar en primera persona lo que de verdad sentí y viví ayer. El Rayo Vallecano Juvenil A y el Real Madrid empataron (3-3) cuando los dos necesitaban ganar. Ahora, los franjirrojos necesitan vencer al Santa Marta en la última jornada y que el Atlético de Madrid no haga lo propio con el Almendralejo. Los goles fueron de Sergio Moreno, Martín y Javi Gómez para los locales y de Gelabert, Martín e Ismael. Hasta aquí lo objetivo. Voy con lo emocional.Todo está dicho ya de estos chicos. Que son una familia, que representan los valores de la Franja como los que más… Pero ayer, cuando al final del encuentro Javi Gómez cayó al suelo hecho un mar de lágrimas o cuando Mario, habitual del filial esta temporada y que había bajado con el Juvenil A a ayudar, hacía lo propio, quedó claro que todo iba mucho más allá. Este grupo de amigos ha hecho del Rayo una religión, un sentimiento y una ilusión tan grande como su Coraje, su Valentía y su Nobleza.
Punto y final a un gran día para el Rayismo.
Canteranos que se dejan todo en el campo y sienten la Franja. Sin duda la mejor noticia para el futuro. pic.twitter.com/l15FXvwSnn
— Unión Rayo (@UnionRayo) 1 de abril de 2018
Esto no va del golazo de Sergio Moreno nada más empezar el encuentro o las dos o tres oportunidades que marró (de esas que no suele fallar el mejor jugador de la temporada). Tampoco de como Martín hizo creer a todos los presentes con uno de sus ya habituales goles de cabeza. Ni de como Javi Gómez revolucionó el partido con un gol y una asistencia, demostrando que tiene más calidad en las uñas de sus pies que muchos de los que tenía en frente. No va de lo bueno que es César Gelabert y de como trajo de cabeza a todos los franjirrojos. Va de unos chicos comandados por Ángel Dongil y su cuadrilla que congregaron ayer en la Ciudad Deportiva más de 1.000 personas.
Había gente subida a la loma que hay detrás de una de las porterías, gente detrás de las vallas viendo como podían a través de la reja, gente agolpada en cualquier rincón que no se querían perder una de las mayores gestas del Rayo. Porque ayer, si me permiten, lo importante no se jugaba en el Estadio de Vallecas, donde me tocó escribir una crónica acerca de como un equipo que se supone que lucha por el ascenso perdía tiempo desde el minuto uno, y de como el conjunto local no iba a por el partido con todas las consecuencias, dependiendo así de los destellos de calidad de uno de sus jugadores. Lo importante se jugaba en el Campo 4 de la Ciudad Deportiva del Rayo, aunque solo fuese por la ilusión que brillaba en los ojos de aquellos chavales. La ilusión de todo un barrio concentrado en las piernas de aquellos chicos que con dificultad pasan de la mayoría de edad (alguno ni eso).
¿Cuánta diferencia puede haber de presupuesto y recursos entre el Real Madrid, el Atlético de Madrid y el Rayo Vallecano? ¿Cuántos jóvenes rayistas se llevan estos dos conjuntos cuando ven alguno que les interesa? No hay que ser cínico, el Rayo hace lo mismo con equipos más pequeños, pero el mérito de estar peleando con blancos y rojiblancos hasta el final no tiene medida. De hecho, el Real Madrid ya no puede ser campeón. Matemáticamente están fuera. En cuánto al Atlético… ¿Quién sabe? No dejéis de creer. Igual en la última jornada hay sorpresa. Y luego la Copa del Rey. Este equipo tiene mucho que decir todavía.
Cubro al Primer equipo todos los fines de semana, y me encanta. Viajo siguiendo a los de Míchel allá donde van para contaros siempre la actualidad de la mejor manera posible. Ruedas de prensa, zonas mixtas, cabinas de grandes estadios… es otro mundo. Eso sí, cada fin de semana como un reloj ahí estoy, siguiendo al Juvenil A. Y es que este equipo lo merece. Más cobertura, más atención y más valor, porque lo que han hecho y están haciendo Dongil y los suyos no tiene nombre. Levantad la cabeza. Bien alta. Que se vea. Mirad a los ojos a todos aquellos que os critiquen y dejadles bien claro que sois rayismo puro. Rayismo en vena. Sois el orgullo de todo un barrio.
Sois grandes Juvenil A. ⚡⚡⚡ pic.twitter.com/d5A3XuTHfp
— Unión Rayo (@UnionRayo) 1 de abril de 2018