El Rayo Vallecano volvía a casa con la idea de recuperar la senda de la victoria. En el once dos novedades: Luca Zidane debutaba de titular ganándole la partida a Morro y Fran García se recuperaba de forma exprés y volvía de su lesión veinte días después.
Antoñín saltaba al campo levantaba las manos y miraba al cielo pidiendo suerte. El sorteo lo ganó la UD Logroñés y tocó cambiar de campo. En la grada Alberto, Armenteros y el expulsado Dimitrievski animaban al equipo.
El partido no empezó bien para el Rayo, en el minuto 16 llegó la polémica con el penalti, este gol supuso el primer gol encajado para Luca Zidane. Pero el gol despertó al equipo de Iraola que en seis minutos de locura remontaron el partido. El primero en el minuto 22 fue obra de Antoñín, el delantero lleva cuatro goles en ocho disparos a puerta y lo celebró besándose sus guantes de Adidas y posteriormente haciendo un corazón.
Tres minutos después, en el minuto 25, llegó la remontada gracias al ya conocido “trenecito”, esto supuso el segundo gol en propia a favor del Rayo. La primera parte también nos siguió dejando detalles: un sombrerito de Trejo, un tacón de Trejo a Advíncula, el árbitro paró el partido para que le colocaran el spray y también se vio una salida con la cabeza de Luca Zidane.
Los detalles continuaron en la segunda mitad ya que se descubrió la marca de la camiseta interior de Óscar Valentín, Nike. Además, en el minuto 55 el árbitro siguió teniendo problemas con el pinganillo. Esta pausa la aprovechó Gorka Pérez, central del Logroñés para que le colocaran las lentillas. Joni entró en la segunda parte con unos guantes Umbro y en el minuto 70 el árbitro sacó la primera amarilla del partido a Leo Ruiz.
En el minuto 77 el Logroñés cambiaba de portero. Se iba Rubén Miño con molestias y entraba Víctor Pradas, el cuarto portero que utilizan en Liga. También se vio a Iraola hablando con el capitán del Logroñés, Iñaki Sáenz y se produjo la entrada de Bebé que volvió a tener minutos al final del partido. Sergio Rodríguez, el entrenador del Logroñés recibió una amarilla y Leo Ruiz fue expulsado por doble amarilla dejando a su equipo con uno menos.
Comesaña no tuvo minutos y fue este el único partido en el que el mediocentro gallego se quedó sin jugar. Como últimos detalles, este fue el tercer partido esta temporada en el que el Rayo consiguió remontar y fue el primero en el que no recibió amarillas para volver de nuevo a meterse en la zona de playoffs.