Tres partidos, dos puntos y ninguna victoria. Ese es el balance del Rayo Vallecano desde que empezó el 2018. Parece que a los franjirrojos no les ha venido bien el nuevo año, y es que antes de las vacaciones, los de Míchel se encontraban a cuatro puntos del líder. Ahora, se han ido hasta los nueve y han salido de los puestos de playoff.
La cuesta de enero
El míster madrileño declaró tras el encuentro frente al Numancia que no le preocupa la clasificación a día de hoy, sino que se fija en los partidos en sí y en las cosas a mejorar. Pero lo cierto es que, en los tres encuentros que se llevan disputados se han marcado cuatro goles a favor por cinco en contra. El balance no es nada bueno.
El Rayo Vallecano cerrará este nefasto enero ante el Lorca en casa. Todo lo que no sea una victoria ante el segundo por la cola de LaLiga 1/2/3 sería un fracaso y dejaría al equipo bastante tocado. Eso sí, parece el rival perfecto para resarcirse de un inicio de año muy malo.
Pero no todo es negro. El último encuentro frente al Numancia dejó la primera portería a cero después de cinco partidos y después de varios choques donde el equipo se había mostrado muy frágil en los balones por alto. En Soria, la dinámica cambió, y se vio a una defensa mucho más sólida otorgando así un poco de esperanza a los aficionados franjirrojos.