Al Rayo Vallecano le está costando un mundo cerrar los partidos esta temporada. Ha habido muchos partidos en los que dominó y se puso por delante, pero es llegar el tramo final de encuentro, y venirse todo abajo.
Lo vimos en el redebut de Paco Jémez ante el Real Betis. El equipo tenía el choque controlado, estaba siendo mejor, teniendo más ocasiones, etc. Sin embargo, Tello encontró el espacio en el minuto 82′ y consiguió batir a Dimitrievski para empatar un partido en el que apenas estaban generando peligro. Otros tres puntos que se fueron al limbo en el último cuarto de hora de juego.
Y es que el conjunto franjirrojo ha recibido un total de 15 goles en los últimos quince minutos de los partidos, los cuales le han hecho perder hasta 16 puntos esta campaña. Casi un 30% de los goles encajados han llegado en este tramo del encuentro.
Algunos de estos puntos perdidos fueron de forma muy dolorosa, como la derrota ante el Barcelona por 2-3 con una remontada ‘in extremis’ de los azulgranas, el 1-2 del Leganés en lo que fue la primera de las siete derrotas que acumuló el equipo o el tanto de Darder en el 93′ que dio la victoria por 2-1 al Espanyol.
Ya sea por falta de concentración o por desgaste físico, está claro que el Rayo está teniendo dificultades a la hora de amarrar los partidos. El domingo fue otro claro ejemplo de ello.