Hay vallecanos de cuna y vallecanos de maleta y tren. Y los primeros, por lo que sea, tienen una habilidad inexplicable para saber cuándo tienen ante sí a un nuevo contiguo. Iván Balliu (Caldas de Malavella, 29 años) tal vez no lo sabe, pero está diseñado para vestir una Franja y jugar en un estadio con tres gradas. Porque reúne todos los condicionantes: cercanía, modestia y humildad. Y, para colmo, señala que su mayor virtud es “no escatimar en los esfuerzos”.
Internacional con Albania pero criado en España, empezó su trayectoria en las categorías inferiores del Barça, hasta llegar al filial. De ahí dio el salto a Portugal, posteriormente a Francia y regresó a España, donde militó hasta la pasada temporada en el Almería. El Rayo, tras acabar contrato, lo firmó por dos temporadas como agente libre. Balliu, con 180 minutos en Primera y apenas un mes en Vallecas, concede una tarde a Unión Rayo. La historia de su fichaje no tiene desperdicio. Ni su sinceridad.
#EntrevistaUR con Balliu
Primero de todo, zanjemos el tema de tu apellido. ¿Cómo se pronuncia?
(Ríe) Es algo recurrente, sí. ¡Baliú! Es Baliú (como si tuviese tilde en la u), pero no pasa nada si alguien lo dice de otra forma.
¿Qué tal tu primer mes en el Rayo? ¿Te esperabas así el club?
Estoy muy feliz, aunque es verdad que ha habido algún problema que otro… Temas internos. He firmado por una entidad con el objetivo claro y un grupo buenísimo. Estoy enormemente agradecido por la acogida, tanto de la gente como de mis compañeros.
“He firmado por una entidad con el objetivo claro y un grupo buenísimo. Estoy enormemente agradecido por la acogida, tanto de la gente como de mis compañeros”
¿Cómo está el vestuario? Ha sido un mes de agosto movido: dos derrotas, el tema del femenino…
No te voy a decir que estamos bien, pero sí con ganas. Estos dos partidos se nos han escapado por pequeños detalles. Creo que hemos dado una gran imagen y no nos hemos sentido inferiores a dos equipos que, a priori, lucharán por objetivos grandes. Veo motivación y muchas ganas. La primera victoria subirá mucho la confianza.
Hablemos de tu fichaje. ¿Cómo se gestó? ¿Quién te dijo por primera vez “te quiere el Rayo”?
Pues mira, te lo cuento. Cobeño me mandó un mensaje antes del último partido contra el Girona, el de Montilivi (0-2). Me escribió el día de antes diciéndome: “Entras en nuestros planes para la siguiente temporada cuando estemos en Primera”.
¡Él ya veía la remontada!
¡Sí, sí, era optimista! Yo le dije “bueno, pues vete preparándome la camiseta que esta noche os vengo a ayudar”. Y a partir de ahí empezaron los contactos. También hubo llamadas de otros clubes de Primera, pero lo que me hizo decidir por el Rayo fue la llamada de Iraola, sus ideas, lo atractivo que es este club, el estilo de juego, la afición… Todo.
“Cobeño me mandó un mensaje el día de antes de Montilivi diciéndome: “Entras en nuestros planes para la siguiente temporada cuando estemos en Primera”. Yo le contesté: “Bueno, pues vete preparándome la camiseta que esta noche os vengo a ayudar”. Ahí empezaron los contactos”
Has sacado la palabra ‘afición’. Con todo el tema Covid hay poco contacto con la gente, pero el otro día, por ejemplo, vaya locura con el recibimiento en el entreno…
Impacta. En estos meses parece que nos hemos acostumbrado al silencio en las gradas, pero cosas así te demuestran que ellos siguen estando ahí. El miércoles nos vinieron a recibir en la sesión, no sé cuántos eran, pero vamos, fue muy chulo. Cantando, con las banderas, las bengalas… Yo acabo de llegar aquí, soy el nuevo y sé que existe esa guerra con el presidente, pero si se me permite decir algo, les pido que nos ayuden. Porque los necesitamos de nuestro lado.
“Yo acabo de llegar aquí, soy el nuevo y sé que existe esa guerra con el presidente, pero si se me permite decir algo, les pido que nos ayuden. Porque los necesitamos de nuestro lado”
Y eso fue un aperitivo. ¿Cómo te imaginas el día en el que juegues por primera vez con Vallecas a reventar?
Todo el mundo, cuando dije que venía aquí, me hablaba de esto. Me decían que ningún estadio tiene el ambiente de Vallecas. Tengo unas ganas inmensas de descubrirlo. Mira, para que te hagas una idea, yo me formé en el Barça y, amigos que tengo hoy en día en el primer equipo, me dicen: “¡Bua, ese estadio es increíble!”. La magnitud de esta afición es así.
“He hablado con jugadores del primer equipo del Barça que me han dicho: “¡Bua, ese estadio (Vallecas) es increíble!”
Hablemos del Iván Balliu futbolista. ¿Cómo te defines como jugador?
Soy rápido, me gusta mucho sumarme al ataque, agresivo en el duelo. Es verdad que disfruto más atacando que defendiendo, pero es que en el estilo de Iraola encajo perfectamente. A él le gustan las transiciones rápidas, los laterales profundos, que se sumen al ataque… Es ideal para mí.
Además de lateral derecho, ¿Hay alguna posición en la que te sientas cómodo?
Alguna vez, como urgencia, he jugado en el izquierdo o como extremo, pero yo soy lateral derecho.
¿Te ha pedido algo en concreto el míster?
No, porque cuando habla siempre lo hace en general. A los laterales nos dice que primero debemos defender, pero que no tengamos miedo en sumarnos al ataque. Nos pide verticalidad y que generemos superioridad numérica en banda incorporándonos.
“Iraola nos dice, a los laterales, que lo primero es defender, pero que no tengamos miedo en sumarnos al ataque”
Dime tu mayor virtud.
No escatimo en los esfuerzos.
Y tu mayor defecto.
¡Ese es fácil! (Ríe) El juego aéreo. Todo lo que sea ir de cabeza me cuesta.
“Mi mayor defecto es el juego aéreo. Todo lo que sea ir de cabeza me cuesta”
A algunos, con esta pregunta, les habrá venido a la cabeza la mano de San Sebastián…
Eso me dejó jodido, porque el equipo estaba haciendo un partido muy serio. Es una jugada que no puedo explicar, totalmente involuntaria. Yo voy a intentar tapar el chut lo más rápido posible, me pilla con la mano arriba y no me da tiempo a retirarla. Una pena porque las cosas iban bien, creo que podíamos sacar incluso más de 1 punto. Son cosas de las que aprender. La tengo en la mente y espero que no vuelva a pasar.
“La mano en San Sebastián me dejó jodido, porque el equipo estaba haciendo un partido muy serio. Es una jugada que no puedo explicar, totalmente involuntaria. […] Una pena porque las cosas iban bien, creo que podíamos sacar incluso más de 1 punto”
Más allá de las dos derrotas, la sensación que está dejando el equipo es muy buena. Se ha plantado cara a dos gigantes como Sevilla y Real Sociedad. Y los puntos han volado por dos acciones puntuales que lo acabaron condicionando todo.
Exacto. Ellos son dos equipos que van luchar por grandes cosas, el Sevilla por ganar LaLiga y la Real por Europa. A mí me queda la sensación de que ninguno de los dos fueron superiores a nosotros. El problema es que en Primera cualquier error lo pagas, no es como en Segunda que tal vez cometías dos o tres y no pasaba nada, aquí no. Toca aprender. Al equipo le faltan dos o tres retoques y con ellos vamos a subir mucho el nivel.
¿Sientes que el equipo tiene falta de gol?
Tal vez es lo que nos falta. Muchas veces creamos ocasiones que no terminan de ser tan claras. Balones parados, contragolpes… Hay cosas, pero puede ser la asignatura pendiente. Tanto por parte del club como nuestra.
“Tal vez nos falta gol. […] Es una asignatura pendiente del club y nuestra”
Ahora, Rayo-Granada.
Partido difícil. Al final miras el calendario y piensas… ¡Madre mía, el que nos espera! Ojalá que con nuestra afición podamos conseguir la primera victoria e irnos al parón de selecciones tranquilos.
Es lo que tiene Primera, claro, que no hay jornadas tranquilas. El nivel es altísimo semana a semana…
Exacto. Sacas el calendario y piensas, pero si es que este tiene a este delantero, este a este medio… Y así con todos. A nosotros nos queda estar muy concentrados, porque los errores, como te he dicho, te matan en esta categoría.
“¿Objetivo? A día de hoy la permanencia. Pero este equipo tiene mucho margen de mejora y no hay que descartar nada”
¿Objetivo, la permanencia?
Este equipo tiene mucho margen de mejora y no hay que descartar nada. Pero a día de hoy la permanencia la firmamos todos. Ojalá llegue cuanto antes y, oye, de aquí a unos meses si quieres hablamos otra vez y volvemos a hablar de objetivos.
