Lograr 40 puntos para sellar la permanencia en Primera División, es una de las trápalas más repetidas en el mundo del fútbol. En esta ocasión, vamos a analizar aquella temporada en la que el Rayo Vallecano firmó el descenso a Segunda División más caro de la Historia del fútbol español. Era la temporada 96/97 y el cuadro franjirrojo acabó el curso con 45 puntos yéndose a Segunda.
El descenso más caro de la Historia
Igual tiene truco, ya que la temporada 96/97 contaba con 22 equipos en Primera División, al igual que la campaña anterior, la 95/96, que han sido los dos únicos cursos futbolísticos con tantos conjuntos en la máxima categoría. Es evidente que el simple hecho de que haya más equipos implica que haya más puntos en juego y que se sumen más puntos, por lo que, obviamente, la permanencia puede resultar más cara.
No obstante, el Rayo arrancaba la temporada 96/97 con la lección aprendida del año anterior: la promoción de permanencia en Primera División ante el Mallorca, lograda de manera extasiada con el gol de Onésimo en Vallecas, hacía que se quisiese andar con pies de plomo. El curso empezaba mal: tres puntos en las cuatro primeras jornadas de Liga no era nada halagüeño para el conjunto dirigido por Paquito.
Es importante resaltar que para volver a restaurar la Liga de 20 equipos, ese curso se producirían cuatro descensos a Segunda, de la posición 19 a 22, pero además habría un equipo que jugaría la promoción de permanencia, el clasificado en el puesto 18. Es decir, habría cinco equipos implicados en el descenso, lo que complicaba todavía más la labor al mal inicio del Rayo, que tenía que acabar mínimo en el puesto 17 para permanecer en Primera. Pese a todo ello, a lo largo del año el Rayo Vallecano solo estuvo tres jornadas en puestos de descenso directo, y ocho en promoción.
Precisamente, esa sería la posición final en Liga: el puesto 18, por lo que el destino quiso que se volviera a jugar la permanencia en una eliminatoria contra el Mallorca, al igual que la temporada anterior. En esta ocasión, los bermellones lograron vencer y ascendieron a Primera, dejando a Vallecas con el camino inverso a la categoría de Plata. Ese mismo curso se produjo la curiosidad de que el encuentro Rayo-Sevilla fue aplazado dos veces, por la nieve primero y por la lluvia después.
Aquel Rayo Vallecano acabó la competición con 45 puntos: la cifra más alta de un equipo que se ha ido a Segunda División. Guilherme fue el máximo goleador franjirrojo con 14 dianas, seguido de Klimowicz con 11. Descendieron también a Segunda Extremadura, Sevilla, Hércules y Logroñes. Con ello, la siguiente temporada 97/98 ya había 20 equipos en Primera División tras la regulación que implicó al Rayo Vallecano.