El Rayo Vallecano vuelve a Primera División y lo hace con un objetivo claro, pero al mismo tiempo complicado: conseguir la permanencia. Según las estadísticas de los últimos diez años, el 76% de los equipos que ascienden se han mantenido al menos dos años en Primera.
Los de Iraola consiguieron la última plaza de ascenso gracias a que fueron el mejor equipo de los playoff, con 3 victorias y 1 derrota, y acompañarán al Espanyol y al Mallorca en la máxima categoría. Los tres pelearán por el mismo objetivo: la permanencia. A priori, es complicado, pero, según las estadísticas de los últimos diez años, salvarse siendo un recién ascendido no es tan difícil ya que, desde 2011 al menos uno de los equipos recién ascendidos ha conseguido la permanencia.
Además, en cuatro ocasiones hubo pleno, es decir, los tres equipos se salvaron. En cinco ocasiones, dos de los tres clubes consiguieron el premio de la permanencia y tan solo una vez, en la temporada 2018/2019, descendieron dos de los tres recién ascendidos. Precisamente, ese año bajaron de nuevo a Segunda División el Huesca y el Rayo Vallecano, la que fue la última temporada en Primera de los franjirrojos.
El Rayo Vallecano busca volver a asentarse en Primera
El objetivo del Rayo Vallecano es conseguir la permanencia y, a partir de ahí, volver a asentarse a Primera División. Con el ascenso de la 2018/2019, no se pudo conseguir, pero con el de la temporada 2010/2011, los franjirrojos se mantuvieron cinco temporadas consecutivas en la máxima categoría, récord del club. Intentar repetir esa gesta debe ser el espejo en el que mirarse para no solo salvarse, sino también asentarse en Primera División.