En tierra de vinos, el Rayo Vallecano se presentaba sin la urgencia de otros días pero con la posibilidad de obtener una buena cosecha con la que mejorar en la tabla. Dicen que en la variedad está el gusto y la franja y su entrenador así lo entendieron por lo que se presentaron en Logroño con múltiples denominaciones de origen y añadas para lograr el mejor fruto.
Desde Santiago del Estero Óscar Trejo prometía vides legendarias, las que empezaron a llegar a Argentina cuando los curas necesitaron vino para cantar misa ya avanzado el siglo XVI.
Desde las Rías Baixas Santi Comesaña podía ofrecernos con su llegada desde Ribeiros hasta Albariños pasando por Valdeorras, Monterreis o Ribeiras Sacras. El tipo abarca mucho campo.
Bebé, siempre original pondría el Vinho Verde y Álvaro García un Castillo de Utrera.
Andrés quiso ser un joven y Antoñín, como buen malagueño tiene a la gente Moscatel.
Lo cierto es que tanta variedad provocó un mejunje que pudo acabar mal. Poco futbol y ocasiones y algún susto provocado por Nano Mesa, que en La Laguna también hay buenos caldos.
La vendimia, laboriosa y dura no daba demasiada esperanza y para colmo, el mejor Finca Moriana del Campo de Calatrava, Fran García, fresco y tempranillo dio el susto con un golpe en la cabeza que finalmente quedó en resaca.
El mejor rayista pudo ser Dimitrievski, que como los buenos caldos de Demir Kapija ciudad con museo del vino a cien kilómetros de su Kumanovo natal mejora con los partidos y los años. Esa uva Vranec de Macedonia del Norte es un primor.
La primera parte solo dio para hablar de añadas y vinos y la segunda para bebérselos todos.
Fran García se dañó el tobillo y tuvo que ser sustituido (drama infinito).
Las gotas de dulzura de la uva Alejandría de Pozo y la calidad de un Jumilla como Isi prometían algo más, pero al equipo le faltó un poco de Alma, se quedó pelín Verdejo y solo pudo ganar con un remate de Mario Suárez a las nubes tras disparar a Santamaría y otro de Guerrero, peleón, como fue el partido y los malos vinos, los que te dejan con cara de empate.
Segundo día sin marcar , un punto y un partido más y uno menos para llegar al playoff. Seguimos